Paysandú : abusaba de su hermana con discapacidad

La Justicia condenó a un hombre de 24 años al comprobarse su responsabilidad en un caso de abuso sexual en perjuicio de su hermana mayor, discapacitada y con problemas motrices, por lo que no puede desplazarse por su propia voluntad. El aberrante caso quedó al descubierto cuando los padres de la mujer –de 39 años– la llevaron al médico por un fuerte dolor abdominal y descubrieron que cursaba el sexto mes de embarazo.

De acuerdo a lo informado por Jefatura, el hecho radica de noviembre del año pasado cuando los padres de la víctima denunciaron que la llevaron al servicio de urgencias del hospital Escuela del Litoral con fuertes dolores en el abdomen. Al examinarla, los médicos constataron que estaba embarazada, pero atónitos por la noticia éstos dijeron que era imposible, ya que su hija siempre estaba al cuidado de familiares.

Adujeron, en tanto, que además de tener problemas motrices –que la obligan a estar acostada o en una silla de ruedas–, la mujer padece de incapacidad para hablar, por lo que se comunica mediante señas. Ante la certeza de que, por su capacidad cognitiva limitada, se estaba frente a un caso de violación, se dio por enterada de inmediato a Fiscalía y la Justicia competente.

En primera instancia, se dispuso la indagación de los padres, que la víctima fuera vista por forense y quedara a cargo de una hermana, imponiéndole medidas cautelares al progenitor mientras se continuaba con la investigación.

Posteriormente mediante datos recabados se determinó que no sería ajeno al hecho su hermano, de 24 años, por lo que se libró orden de detención, la que fue cumplida este viernes por la Comisaría Especializada en Violencia Doméstica.

Una vez en la órbita penal, la Justicia Penal dispuso la formalización de la investigación y posterior juicio abreviado para el hombre, imputado y condenado por “un delito de violación especialmente agravado en concurso formal con un delito de abuso sexual especialmente agravado”, imponiéndole como pena 3 años de penitenciaría de cumplimiento efectivo.

Fuente El Telégrafo