En la cordillera de Los Andes la superficie cubierta de nieve durante la temporada seca (enero, febrero y marzo) retrocedió más de 1.200 km², casi 2 veces y media la ciudad de Montevideo, durante las últimas décadas.
¿Cómo sería el accidente de Los Andes si en vez de haber ocurrido en 1972 ocurriese en el 2024? La respuesta a esa pregunta la puede esbozar la ciencia y la evidencia recolectada en las últimas décadas.
En la cordillera de Los Andes la superficie cubierta de nieve durante la temporada seca (enero, febrero y marzo) retrocedió más de 1.200 km², casi 2 veces y media la ciudad de Montevideo, durante las últimas décadas.
Un estudio de la Universidad de Santiago de Chile, que fue publicado por la revista Nature, analizó el nivel de la nieve en la cordillera de los últimos treinta años. Para eso, se analizaron 1.952 imágenes satelitales, con cielo despejado, tomadas desde 1986 hasta la fecha.
Luego de observar las imágenes, se determinó que, en promedio, la superficie de nieve de la cordillera disminuyó entre 10% y 20% cada década. Eso quiere decir que si el accidente de Los Andes ocurriese hoy, en esa zona habría cerca de un 50% menos de nieve.
Incluso, según los registros de datos meteorológicos, en 1972 y 1973 se registraron las nevadas más intensas en mucho tiempo. Esto quiere decir que cuando el avión cae, había más nieve de lo habitual para amortiguar el impacto y evitar, por ejemplo, una explosión.
Si se ve una comparación de una toma del accidente o del rescate y una de cómo está ahora ese espacio, se apreciará que los paisajes son totalmente distintos: en uno vemos mucha nieve (en noviembre, diciembre) y en el mismo lapso de tiempo, pero en la actualidad, vemos un paisaje mucho más rocoso. Esto significa una cosa: que si el accidente fuera hoy, el avión impactara sobre rocas, lo que generaría una fricción mayor entre la aeronave y la tensión superficial, y el avión explotaría.
¿Qué rol juega en esto el cambio climático? Solo para hacerse una idea, el pasado agosto, por ejemplo, en pleno invierno chileno, los termómetros llegaron a marcar 37°C —la temperatura normal en esa época suele rondar los 18 °C—:esto habla de un nivel de deshielo mucho más acelerado de lo que debería.
Informe de la Periodista Agustina Rovetta en TELEMUNDO:
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